Por
fin hace unos días llegó el nuevo principio de curso y ya he pasado mi primera
semana. Este año, tras algunos meses más por la prejubilación, he vuelto a
sentir el cariño de cuantos alumnos tuve en los cursos anteriores. Desde que
aparecí por mi centro, y se enteraron de que estaba por aquí, ha sido un
continuo bajar chicos y chicas a saludarme a la sala de profesores a preguntar
por mí y a contarme, como muchos han hecho siempre, sus vidas.
En el tiempo que voy a estar estos meses, mi labor consistirá en el acompañamiento de nuevo profesorado en las asignaturas que siempre he dado, o con no tan nuevo apoyando a grupos difíciles o con alumnos concretos que presentan algunas dificultades, no solo académicas, incluso de idioma o mil cosas más de apoyo a personas que llevan una tutoría por primera vez y, por qué no, echar una mano a compañeros o compañeras que necesiten cualquier cosa, aunque no esté reflejado en lo que he firmado para este periodo.
Cómo no, me preocupa ese alumnado del que he estado siempre tan atento, las personas con TDAH, aunque también Síndrome de Tourette, Asperger, acoso escolar etc. Concretamente ayer hablaba con una profesora de este último tema a raíz de un chico diagnosticado, a la vez que analizamos algunos comportamientos de otro aparentemente con rasgos claramente hiperactivos. En cualquier caso, mi objetivo sigue siendo estas personas, tanto los ya conocidos como los que vayan surgiendo. De momento ya hemos quedado para hablar de estos dos últimos casos y poder ver cómo ayudarles lo mejor posible.
Fco. Javier Lozano 18 –
septiembre – 2023
No hay comentarios:
Publicar un comentario