viernes, 16 de octubre de 2015

Respuesta con toque adolescente

Si vives con adolescentes sabes que el que salga el día con sol o nublado no es impedimento para que te sorprendan. Yo, por eso todos los días entro al cole con los ojos y los oídos bien abiertos, pero estoy convencido de que aunque entrara durmiendo me sorprenderían igual, porque una vez sí y otra también te desbordan con sus ocurrencias y a veces, no tan ocurrencias.

Hace unos días, antes del recreo, tenía clase de Ciencias de la Naturaleza con un grupo de segundo de E.S.O. Al entrar, una chica que siempre me recibe con su sonrisa, me pregunta una vez más por qué no les pongo alguna película o algo así. Ya sabéis que hay profesores en todos los sitios que con ese tipo de cosas se ahorran una clase y el tiempo pasa más tranquilo, pero no es bueno abusar de ello y debe hacerse programándolo bien. Así que la clase comienza después de alguna broma y nos metemos a ver cosillas de las células que es lo que toca últimamente aunque no sea lo más sugerente, pero bueno, entre todos llegamos casi a disfrutar de lo que hacemos.

Al llegar a la respiración celular y decir en qué consiste, hablamos de ATP, mitocondrias y demás cosillas que encierra esa cosita tan pequeña e importante a la vez. Después paramos a hacer unos ejercicios para descansar un poco. Al llegar al segundo de ellos, la alumna de la que os hablaba al principio, levanta la mano y me dice que lo quiere hacer ella. Lo leo en voz alta… “¿Respiran las células vegetales?” y ella contesta rápidamente... “Sí, claro”. La cosa no queda ahí, porque como toda pregunta que se precie no debe conformarse con un escueto sí o un no por respuesta, además de que si vemos lo que viene a continuación el “sí” estaba más que garantizado. Sigo leyendo… “¿Por qué deben hacerlo?” A lo que vuelve a contestar con toda seguridad… “Porque si no se mueren” En ese momento un mar de manos se levanta por toda la clase, todo el mundo quiere dar una explicación más completa, algo que justifique la muerte de la pobre célula que todos habían visto venir si no realizaba ese ejercicio tan necesario para todos que es la respiración.

Claro que al final aclaramos las razones que le llevan a respirar a la célula para que su fin no llegue prematuramente, pero también valoramos la seguridad y la fuerte convicción que llevaron a la chica a dar una respuesta tan contundente que, evidentemente para ella, no tenía como suele decirse vuelta de hoja. Cuando te enfrentas a estas situaciones te das cuenta de que estos jóvenes que nos rodean no son como la gente cree y habla de ellos a la ligera sin conocerlos en su salsa, en estos momentos en que son capaces de dar respuestas contundentes y convencidos de que están en lo cierto porque sus argumentos son irrefutables, o ¿la célula no se muere si deja de respirar? Pues eso, que tenemos que estar más atentos a sus respuestas que muchas veces, hasta dentro de esa pequeña ironía que suelen mostrar están llenas de realidad, una realidad que está ahí y que muchas veces, lejos de escucharles les abruma con calificativos que ni a la individualidad ni a la generalidad hacen ningún favor, lejos de eso da una imagen de nuestros jóvenes que no se corresponde con lo que son en el día a día.


Javier Lozano 16 – Octubre - 2015

2 comentarios:

  1. Hay muchos adolecentes que suelen ser prácticos y desean pasar rápido de un tema a otro, eso te debe sonar familia, la ansiedad y la necesidad de encontrar algo que les llame la atención y los deje absortos para no caer en el rutinario limbo... Me refiero a los chicos con TDAH. Gracias por compartir tus días de colegio. Un abrazo.

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  2. Claro que me suena Amanda, por eso siempre reclamo más atención y de mejor calidad para todos ellos. Muchas gracias. Besos

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